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Por lo general los hombres no entienden lo que piensan las mujeres en realidad. Conmigo debería ser sencillo, si yo digo no, de verdad es un no.

También está lo de las promesas. Por lo general se perdona que no cumplas lo que dices, y poco a poco conforme sigues incumpliendo te van perdonando con mayor dificultad. Para mi es simple, yo te perdonaré las veces que lo resista, para mí siempre será igual de fácil perdonarte, pero va haber un momento (el cual no te podrás dar cuenta porque ya te había perdonado con la misma facilidad) en el que yo no te perdone más, porque simplemente me llega el fastidio de golpe.

No es amenaza, es advertencia.